A las personas que han nacido en Madrid, de padres y abuelos de la capital se les dice “gatos”. Todo viene de una historia que es más una leyenda. En 1083, el Rey de Castilla Alfonso VI quería asediar a los moros de Magerit, pero se lo impedía una muralla. Un soldado habilidoso consiguió trepar e iniciar la conquista, todos lo llamaron “gato”.
Desde entonces así se les dice a los madrileños muy madrileños. Y como a los gatos, les gusta la noche y te darás cuenta de ello cuando visites la capital española. A fuerza de cañas y copas, la ciudad tiene recorridos con puntos emblemáticos si el plan es pasear y simplemente disfrutar.
Esta ruta que te presentamos es sencilla, pero condensa la sustancia de Madrid. Y con StopOver Hola Madrid, el nuevo beneficio de Iberia, podrás realizarla sin preocuparte por las escalas o costes adicionales. Solo reserva tu parada gratuita en la capital española cuando realices un viaje con destino u origen a Asia o América.
Crédito: Vinos el 21. Vinos el 2 / Calle de Sagasta, 2
¿Te apetece ir a una taberna mítica de la noche madrileña?, toma la línea 4 del metro y quédate en la estación de Bilbao. Busca Sagasta 2, ahí, un aviso grande dice Vinos. entra sin pensar.
Estarás entrando en una taberna que atiende al público desde 1880, nada más y nada menos, desde siempre administrada por la misma familia. Quedan pocos lugares como estos en la capital española.
Consejo: ¿qué pedir?, lo más sencillo, un vermut de grifo, una caña, un botellín de cerveza o un chato de vino. Acompañarán tu pedido con unas aceitunas o una tapa de jamón o lacón. Vale por la experiencia de las mesas bajas, una barra que destila historias y el ambiente castizo en medio del barullo de la glorieta de Bilbao.
Crédito: Casa Camacho2. Casa Camacho / Calle de San Andrés, 4
En el centro del barrio de Malasaña hay una taberna mítica para los merodeadores de la noche madrileña, no tiene nada que ver con su decoración o con el aspecto moderno que están adoptando los lugares de la zona.
Este local es famoso por sus Yayos, una bebida a base de ginebra, pero mezclada con vermut y gaseosa sin sabor. De regustillo suave y refrescante, los Yayos pueden definirse como peligrosos, porque puedes tomarte más de uno en muy poco tiempo y empezar a tambalear. Así que, ante todo, precaución.
Pero lejos de las recomendaciones etílicas, Casa Camacho tiene el encanto del bar de siempre, con una barra enorme, desde la que se sirven, hace más de 20 años, vermouth de grifo, cañas y Yayos.
Crédito: Sidrería El Tigre3. El Tigre / Calle Infantas, 23
Hay un aspecto de la vida madrileña que impresiona a todos los extranjeros: las cañas con aperitivo. El maravilloso invento de servir algo de comer con una cerveza pequeña no se estila en muchos lugares del mundo, y Madrid es el lugar donde hay que aprovechar.
En El Tigre, esa costumbre se lleva a otro nivel. La consigna es básica, vas por cervezas y sales con cena. Pedir una caña en este local es volver a la mesa con dos platos y un vaso. ¿A que no suena nada mal?
Patatas bravas, lacón, croquetas. No sabes con qué te vas a encontrar, pero prometemos que saldrás satisfecho. Eso sí, tendrás que esperar, porque siempre está lleno, pero si tu intención es ir de tapas por Madrid, este es un buen inicio.
Crédito: Cine de verano en La Bombilla4. Cine La Bombilla / Parque de La Bombilla Argüelles
Si estás en Madrid por el verano, hay un plan que tienes que tatuar en tu agenda: el cine de La Bombilla. La promesa es atractiva: proyección al aire libre, comida y buen tiempo. Normalmente se realiza entre la primera semana de julio y la primera semana de septiembre.
Un bocata, una cerveza o un refresco y a ver una buena película. Un plan al aire libre en las noches de verano de Madrid. Al Parque de la Bombilla llegas por la línea 4 de Metro hasta Argüelles, caminas un poco, menos de 10 minutos y ahí lo tienes, un momento de distracción para toda la familia.
Consejo: puedes comprar las entradas por la web https://www.fescinal.es/informacion.php, aunque también puedes adquirirlas en la entrada de la proyección. Pero no tengas prisas, con StopOver Hola Madrid tendrás toda la temporada de cine para decidir cuándo ir.
Crédito: @labobiamadrid5. La Bobia / Calle de San Millán, 3
La movida madrileña tuvo en La Bobia uno de sus referentes, fue escenario de rodajes de películas de grandes como Almodóvar o simplemente una de las más míticas cervecerías de la zona.
Lo que te encontrarás ahora, si pasas por La Latina en busca de una caña o una ración de croquetas es un “rescate”. El local, abierto desde 1933 como expendio de cerveza, fue punto de encuentro de la ‘contracultura’ de la capital hasta su cierre en los 90. Ahora, ha reabierto con el nombre tradicional, pero podrás probar cocina asturiana.
Como parte de un recorrido por los estandartes de la noche madrileña, este lugar no puede faltar.
Consejo: no te olvides de sacarte una foto con su aviso, que quedará para el recuerdo.
Crédito: #barsanturce6. Bar Santurce / Calle de las Amazonas, 14
La situación es esta: vas caminando por El Rastro, con miles de personas alrededor y te apetece una caña. ¿Qué debes hacer?, busca la Calle de las Amazonas y detente a medio camino. Santurce en letras grandes, ¿lo ves?, pues en ese lugar sirven cervezas y sardinas desde 1977.
Este es un bar “de toda la vida” que casi siempre está muy lleno. Así que si te pasas por allí hay que tener paciencia. Pero la espera lo vale. Solo una cosa, debes ir temprano, que cierran pronto, sin embargo, en verano todo depende del ánimo de los dueños.
Consejo: pide una buena ración de sardinas, acompañadas por unos pimientos del padrón. De allí saldrás muy a gusto.
